El Archipiélago Juan Fernández, ubicado en el Océano Pacífico, a unos 670 km de Chile continental, se encuentra formado por tres islas: Robinson Crusoe, Alejandro Selkirk y Santa Clara, esta última corresponde a un islote de menor tamaño no habitado. La Isla Robinson Crusoe, siendo la más grande, posee una superficie de 47,9 km2 y un único poblado, San Juan Bautista, donde vive la gran mayoría de sus casi 1000 habitantes. Administrativamente, el archipiélago pertenece a la Región de Valparaíso de Chile. Las tres islas del archipiélago se elevan abruptamente sobre las aguas del Pacífico, con pocas playas y un número limitado de bahías protegidas, posiblemente formadas por antiguos cráteres volcánicos.

Su ubicación aislada, lejos de los principales asentamientos humanos o del ruido, convierte a las Islas Juan Fernández en un sitio ideal para ambas estaciones del Sistema Internacional de Vigilancia (SIV), que corresponde a la estación hidroacústica HA03 e infrasonido IS14. La Instalación Central de Procesamiento (CRF) de ambas estaciones del SIV se encuentra dentro del poblado de San Juan Bautista. Desde aquí, los datos se transmiten, casi en tiempo real, al Centro Internacional de Datos en Viena, Austria.

Las estaciones de esta localidad sufrieron un gran cambio luego del terremoto y tsunami que azotó a nuestro país el 27 de febrero de 2010, y también, debido al devastador tsunami que afectó duramente a la parte poblada de la ciudad donde también se encontraba la CRF.

La Comisión Preparatoria para la Organización del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares (OTPCE) terminó en 2014 su más compleja reconstrucción de estación, liderada por los expertos Jerry Stanley, Georgios Haralabus y Mario Zampolli.

Este esfuerzo se extendió durante cuatro años, e involucró un costo de más de 20 millones de dólares. Es importante señalar que esta reconstrucción no hubiera sido posible sin el apoyo incesante de los funcionarios de la CCHEN, liderados por Guillermo Parada Carvacho, y de la empresa Bentos, quienes han mostrado un gran compromiso desde comienzos de su instalación a la fecha. Asimismo, cabe destacar el apoyo de los países signatarios y del embajador de Chile en esa época, Alfredo Labbé, además de la Autoridad Marítima, de la Municipalidad de Juan Fernández y de todo un equipo involucrado en este gran trabajo.

La estación de vigilancia Hidroacústica (HA03) consta de dos tripletes de hidrófonos, fondeados a aproximadamente 2.000 m de profundidad. Uno de los tripletes está instalado al norte y el otro al sur de la isla Robinson Crusoe. Los tripletes corresponden a un arreglo de tres hidrófonos, estos últimos son elementos pasivos que permiten captar las ondas hidroacústicas.

Los tripletes se conectan a la CRF a través de cable de fibra óptica desde su ubicación en el mar hasta la central en tierra.

La CRF contiene el equipamiento electrónico que recibe y formatea los datos de los sensores hidroacústicos, los que son transmitidos de manera remota y continua al Centro Internacional de Datos (CID) ubicado en Viena, Austria. Los datos se transmiten empleando la Infraestructura Mundial de Comunicaciones (IMC) que consta de terminales tipo VSAT (terminales de muy pequeña apertura), con antenas ubicadas en la CRF.

Chile posee dos estaciones de Infrasonido, una ubicada en Isla Robinson Crusoe y otra en Rapa Nui Las estaciones de infrasonido en general debe ubicarse en sectores apartados de fuertes vientos, es por ello que en lo posible, se escogen sitios con bosque frondoso, apartado de la central y de cualquier fuente acústica de origen artificial.

Los sensores de estas estaciones están distribuidos en una configuración de matrices que miden los cambios de micro presión en la atmósfera que se generan por la propagación de ondas infrasónicas, estas ondas tienen baja frecuencia (<20 Hz), por lo que no son audibles para el oído humano.

El acceso a los sitios de infrasonido, en Isla Robinson Crusoe, es muy complejo, ya que se encuentran en los cerros dentro del Parque Nacional y no existen caminos para vehículos, por lo que el acceso se realiza a pie o con caballares. Además, las condiciones climáticas con inviernos muy lluviosos sobre terrenos de pendientes resbaladizas es un factor determinante en la dificultad para el acceso a los sitios en gran parte del año.

De acuerdo con el proceso de certificación de las estaciones TPCE, HA03 e IS14 cumplen con todos los requisitos para dicho fin y por lo tanto estas dos estaciones IMS se encuentran certificadas. La Prueba de aceptación de fábrica y las pruebas de integración para HA03 se completaron en 2002, al igual que la instalación de equipos de procesamiento en tierra. El enlace a la Infraestructura Mundial de Comunicaciones (IMC) se aprobó a principios de 2003, después de lo cual se instaló el segmento submarino y se estableció el flujo de datos a Viena. Luego de la capacitación a los operadores en 2003 y una visita a la estación, HA03 fue transferida a las operaciones del CID. Posteriormente, luego de la reconstrucción de la CRF y el restablecimiento de las estaciones, las estaciones fueron recertificadas en 2014, lo cual se mantiene hasta la fecha.